El motivo de mi carta es para señalar que no puedo estar más de acuerdo con lo planteado en el artículo publicado en esta página Clasificatorio de Frutillar 2017.
En el transcurso de los últimos años la normativa que rige a nuestro querido deporte ha tenido numerosos cambios, algunos en la práctica con aciertos y otros claramente no han funcionado porque fueron mal diseñados. Lamentablemente cuando algo está mal, la mayoría de los socios de la Federación no reaccionamos o lo hacemos tarde cuando ya no es posible revertir posibles errores. No quiero entrar en polémica respecto de las buenas o malas intenciones que podrían haber detrás de estos “ajustes”, pero al evaluar preliminarmente los resultados de los dos Clasificatorios que ya se realizaron, vemos que claramente la Zona Sur fue duramente perjudicada debido a que el número de colleras completas es superior a las otras, no obstante los cupos para Rancagua que entregó cada serie es la misma para todos los Clasificatorios. Como ejemplo, en las series Segunda B participaron 48 en Frutillar y 37 en San Fernando respectivamente. Si a lo anterior le sumamos que también son los mismos cupos que cada Zona tiene para ir al Clasificatorio de repechaje, definitivamente el algoritmo que asegure iguales posibilidades para todos en forma justa y equitativa no fue aplicado. Entiendo que cada año son más las colleras que tienen la ilusión de llegar al Campeonato Nacional y estoy de acuerdo con buscar mecanismos de selección para la gran final; también tengo claro que a los Clasificatorios se debe tratar de llegar con los caballos lo más afinados posible, pero tampoco me parece que para poder tener un lugar en el Clasificatorio de repechaje dependa exclusivamente del desempeño demostrado en el Clasificatorio que le correspondió correr, ya que tanto corredores como jinetes algunas veces “están en su tarde” y se obtiene un buen resultado, pero de esta forma no se considera el mérito realizado durante toda la temporada. Espero que los dirigentes que nos representan tomen cartas en el asunto para que el próximo año los corredores de mi zona tengan las mismas posibilidades que el resto del país.
Puerto Varas, 30 de Abril del 2012
Señor
Juan Easton Hevia
Presente
Estimado Juan:
junto con saludarte, quiero agradecer tu hospitalidad en este reciente Curso que diera el Maestro y Campeón Sud Americano de Rienda Internacional Jango Salgado. Una valiosa y bonita experiencia para los que tuvimos la oportunidad de asistir, la que ha sido enriquecedora tanto en lo técnico, como en lo social y humano.
Tuvimos la ocasión de poder adquirir conocimientos que no sólo son útiles para los que nos apasionan los Caballos Chilenos, sino que son básicos y elementales para cualquier disciplina ecuestre y que para los que hemos pasado nuestra vida cerca de los caballos, nos damos cuenta que en el afán de competir y figurar hace olvidar cada día mas que la base de cualquier deporte ecuestre está en un buen inicio, siendo la dedicación y la paciencia a la espera de la madurez de cada ejemplar para llevarlo a la competencia, sin ponerle fecha a su debut, sino que esperando el día que esté realmente preparado para hacerlo.
En estos días el afán de la mayoría de los jinetes por estar en la competencia hace caer en el error de saltarse etapas que son elementales en el adiestramiento y que ayudan a esperar la edad y la correcta terminación del arreglo de cada caballo
Por otro lado ha proliferado la cantidad de jinetes en una tremenda desproporción a la de los arregladores, adiestradores o entrenadores de caballos, lo que obviamente por un lado produce una gran demanda de caballos para competir y una baja cantidad de caballos bien empezados y correctamente terminados para las diferentes disciplinas y, cuando digo esto, hablo en términos generales, rodeo, rienda, equitación, etc.
Los que criamos Caballos Chilenos y llevamos más años en el deporte del Rodeo, podemos apreciar quizás con mayor claridad estas falencias, pese a que la selección funcional del Caballo Chileno ha sido extraordinaria en los últimos 50 años, aunque nos hemos olvidado de la importancia que tiene la morfología, pero volviendo a lo funcional llegamos al siglo 21 con un Caballo con una facilidad de aprendizaje extraordinaria, unos mejores que otros, porque malos no hay, pero desgraciadamente se abusa y se mal usan sus cualidades, ya sea por desconocimiento o por la presión de la demanda por llevarlos prematuramente a la competencia, muchas veces sin importar de cuanto va a durar este caballo en el deporte, generalmente con suerte una o dos temporadas y después desaparece de los escenarios, luego vienen las justificaciones que tal o cual sangre no sirve ”por que no son de ley“… y todas las disculpas que se buscan para ocultar la incapacidad o la inexperiencia para poder terminar una animal en el destino deportivo que se le asignó.
La verdad es que cada vez hay menos personas que sepan sacar caballos para la rienda y que les interese el tema, es más fácil abusando de sus cualidades vaqueras echarlos al lado del topero, ejercicio que lo hacen por instinto y a lo que aprendieron a topear, lo hacen atajar, resultado, un caballo seguidor del toro, muchas veces atajador y sin arreglo y lo atajador le durará hasta que comience a sentir los golpes y donde primero comenzará a mostrar los resabios será en la boca,obvio, porque nunca se la hicieron, ni menos le dieron la oportunidad de madurar para poder resistir la rudeza de las a veces irracionales exigencias de la competencia, en que se suelen mostrar más los jinetes y no los caballos. Digo todo ésto, sin ofender a nadie, porque hay muchas personas que han tomado como un respetable medio de vida el trabajo de los caballos y que en la muchos de los casos son autodidactas y se esfuerzan por hacerlo lo mejor posible y que no todos tuvieron la posibilidad de aprender al lado de algún Maestro que le transmita sus conocimientos y experiencia, como también no pueden ser guiados por quienes los contratan, porque en la mayoría de los casos los conocimientos de éstos son mas escuálidos que los que están a diario entregando sus servicios.
Esa es la realidad de hoy día, por eso que es tan importante copiar esta iniciativa, esta vez fue con el Maestro Brasilero Jango Salgado, como podrá ser en otra oportunidad un Maestro Chileno, que tengan la generosidad de entregar sus conocimientos, en beneficio de los aficionados como de los caballos, pero es muy importante continuar, hasta me atrevería a insinuar en instituir ésto como una Sección de la Federación de Criadores, ya sea creando una Escuela de Adiestramiento como lo hacen en otras disciplinas y que existen como carreras profesionales en los países desarrollados.
Además ver la posibilidad si tomando bajo la tutela de la F.C.C.Ch. a la Rienda Chilena, se logra poner en el lugar que le corresponde, asignándole la importancia que tiene como base fundamental el arreglo del Caballo Chileno, que a su vez ayudaría a darle más valor a la olvidada morfología, la que está en estrecha relación con la funcionalidad.
Sé que éste es tema que ha costado mucho enfrentar, porque existen equivocados celos institucionales que se contraponen y que le han hecho un flaco favor a la Raza Chilena, que por falta de generosidad y objetividad no ha permitido avanzar en busca de beneficios a más largo plazo.
Los históricos logros del Caballo Chileno últimamente al ser declarado Monumento Nacional, como reserva Natural, luego llevado al los Organismos Internacionales como la FAO, para ser reconocido como Raza, la formación de la Asociación de Caballos Chilenos en Brasil, confirmando con ésto la importancia de la Internacionalización de la Raza como Raza Pura, independiente del gran aporte mejorador que ha entregado a los Criollos de América en los últimos 35 años, desgraciadamente no siempre reconocido por los beneficiados .
Hoy presente en Europa en apoteósicas presentaciones de nuestras tradiciones y culturas ancestrales, que ha llevado la Escuadra de Palmas de Peña Flor, siendo el principal actor nuestro Caballo, por el cual nos debemos sentir orgullosos como chilenos, como huasos y como criadores, lo que nos debiera hacer recapacitar en lo importancia que significa no solo tener buenos y bonitos caballos, sino que también bien arreglados.
Para finalizar te pido disculpas por haberme extendido tanto, pero ésto no sólo apasiona, sino que merece un análisis a fondo en busca de soluciones que ayuden a mejorar las indiscutibles falencias que se han ido acentuando en el correr del tiempo en materia de arreglo o adiestramiento.
Te reitero mis agradecimientos por haberme considerado como participante a esta reciente cita y poder recibir los conocimientos del Maestro Salgado, sobre todo para los que sentimos cariño por los caballos y que no compartimos la afiebrada pasión de hoy día por sólo competir, la que suele llevar a cometer excesos y errores que sólo perjudica el valioso potencial genético de la raza y que sabemos que al ser tratados racionalmente, sumado a su nobleza natural, nos van a entregar siempre grandes satisfacciones.
Me despido de ti con un gran abrazo y un saludo para quienes te colaboraron, en especial para Cristián Nauor.
Muy atentamente,
Jorge Cañas O.