
En este gran artículo publicado hace más de 20 años por don” Raúl Pavéz Romero”, el histórico Secretario General de la Asociación de Criadores de Caballares Chilenos, analiza muy en su estilo la importancia del reproductor y base del caballo chileno actual, Quebrado, hijo de Cristal y Franela, que hoy es el puntal más sólido del caballo criollo chileno.
Por: Raúl Pavéz Romero
Hace algún tiempo se publicó un trabajo denominado: “Los imprevisible mecanismos de la Herencia”. Buen título. La herencia continúa escondiendo misterios a la ciencia. En un acápite dice: “la genética ha progresado mucho más en los animales que en los humanos”. La razón estaría en que hay más posibilidades de experimentos en animales. El profesor Hamburger sostiene: “No representamos más que la simple malla de una red que proviene de nuestros antepasados y que se dirige, aparentemente al azar, hacia el porvenir”. ¿El secreto de la calidad reproductora de “El Quebrado” o de “Alcatraz”, por citar sólo a dos padrillos famosos? No es uno. Puede ser innata la transmisión del instinto y condición corralera, como ocurre con otros animales, en que el olfato, el oído, etc., son atributos naturales. Puede provenir de su ascendencia corralera, ya que sus padres, abuelos y bisabuelos lo fueron. Nos inclinamos por este factor. Seguramente esa ascendencia corralera date de generaciones muy anteriores y de las cuales no se dispone de antecedentes fidedignos. En Chile, por razones no suficientemente explicadas, la orientación de la crianza ha dado máxima importancia a las condiciones de los potros. Es un absurdo zootécnico y genético. En otras razas se otorga principal relevancia a las yeguas. Otro error. Por ley de herencia la participación debe ser similar. Padre de “El Quebrado”. Fue “Cristal I, hijo de Guante II”. “Cristal I dio tres productos machos de linda estampa y que destacaron en exposiciones de la “Quinta Normal”, Huilque” “Beduino”y “Enchufe”“. En “Aculeo” se recordaba a los dos primeros como buenos corraleros. Otros hijos destacados en las medialunas fueron “Espejo”y “El Tani”. En hembras tuvo hijas excelentes de vacas. Destacaron las que corrían los hermanos Adolfo y Fernando Luco, dos jinetes de excepción. Al presentarse “Franela”, a “Cristal I”, se buscó otra de exposición. Por esas cosas extrañas de la genética, nació “El Quebrado”, que carecía de esos atributos. Vamos andando y veremos. “Franela”, era una yegua hermosa y de altísimo linaje. Esos fueron, justamente, los factores que incidieron para dedicarla a la reproducción, incluso sin haberla sometido a ningún adiestramiento. “Franela”, era hija, nieta y biznieta de “Guante”. Era hija de “Tesonera” por “Tintero” y “Vicuña I”. Los aculeguanos la evocaban como la mejor yegua corralera de su época. Resumiendo: “El Quebrado” es la consecuencia de “Imbriding”, exagerado y practicando con el afán de perturbar o acrecentar las condiciones de un gran corriente de sangre corralera. ¿Imbriding?. No desconocemos los resultados obtenidos con este sistema. En el caballo de carrera y en el de trote, dio excelentes resultados. Seguramente en muchos otros. Sin embargo hay riesgos de esterilidad y otras alteraciones. “El Quebrado” como reproductor del criadero “Las Camelias” A su ingreso se encontró con un plantel de yeguas de crías-finas inscritas- muy limitado. Pocas y sin trascendencia corralera. Dos potros servían en el criadero: “Cosaco”, un lindo ejemplar y un consumado campeón de “Movimiento a la Rienda”, al que hizo famoso Luis Torrealba, más conocido como “El Huaso Torrealba”. Fue breve la permanencia de “Cosaco”. Murió prematuramente. El otro era “Candil”, un hijo de “Alicanto” y “Candelilla”. Buenos de vacas, aunque exageradamente liviano. Hizo collera con “El Quebrado”. Se incrementó el plantel. Fueron adquiridas “Tabla” “Zurzula” y “Huira”, hijas del famoso “Retinto”. “Tabla”, fue extraordinaria de vacas. De “Aculeo” vinieron seis u ocho potrancas de gran pedigrí, pero de poca alzada. Tres destacaron por su calidad corralera: “Esgrima”, “Estafa” y “Quebrantada”. Don Manuel Pavéz Gaete aportó tres muy bonitas y buenas: “Chusma”, “Corona” y “Marquesita”. Del criadero de don Francisco Encina, provenía “Ágata”, “Polvorita”, entre otras. La duda razonable: ¿De qué magnitud habría sido la proyección de “El Quebrado”, cruzado con yeguas de altísima calidad vaquera? Incógnita insuperable. Tuvo un poder transmisor de sangre y bondades realmente asombroso. Dejó noventa hijos en este criadero. Igual número de machos que hembras. Evaluando sus diecisiete años de servicio, no fueron muchos. Tal vez inducidos por la notable campaña corralera, no se reprodujo de mayor manera. Cabe acotar que en sus comienzos en “Las Camelias”, se le cruzó con yeguas no inscritas, en las cuales dejó excelentes caballos de rodeo. El éxito de “El Quebrado” como reproductor es tan significativo que jamás ha sido desconocido. Desde el punto de vista zootécnico, se temió que sus hijos heredaran su pequeña alzada o no fuesen de líneas armoniosas. Esas dudas se desvanecieron. Fueron de mayor alzada que la suya, más aún, distinguidos, y de buen tipo. No es una afirmación gratuita. Sus hijos, “Quebrado II” y “Empeñoso”, obtuvieron Grandes Premios en la Exposición de la Quinta Normal de los años 1932 y 1954. “Comodoro” fue Reservado Champion. Sus nietos “Polpaico” y “Pililo”, criados por don Gustavo Donoso, Reservados Champion.”Capricho” biznieto, “Filtro” destacó por estampa y bondades corraleras. Conclusión: Es absolutamente posible lograr una conjunción de belleza zootécnica y calidad corralera. Reproductores notables, hijos, nietos y biznietos de “El Quebrado” Corpiño: “Quebrado” y “Cardilla”. Madre “Gacho”. Optimo en riendas. Muy bueno de vacas. Arreglado por Nicolás Tobas. De propiedad de Rafael Undurraga. Tordillo. Chambón: “Quebrado” y “Chusma”. Propio hermano de “Frangollo”. Adquirido para Chillán, donde fue bueno de vacas y buen reproductor. Picurrio: “Quebrado” y “Corona”. Muy parecido a “El Quebrado”. Poca alzada. Excelente reproductor. Padre -entre tantos-del conocido y acreditado “Picaporte”. Prestigio: “Quebrado” “No me dejes”. Por una década fue proclamado por la Asociación de Criadores de Caballares como mejor potro corralero. En el criadero “Las Camelia”, se le consideraban como mejor caballo corralero de que se dispuso. Lo trabajó Pepe Zabala, Champion de Chile con”“Pichanguero”. Poco y mal al reproducido. Estafador: “Quebrazo” y “Estafa”. La madre óptima de vacas. El criadero debió cederlo por cumplir un compromiso de orden afectivo. Refuerzo: “Quebrado” y “Arozamena”. Tenía que ser un notable reproductor y lo fue. Su madre era hija de “Cosaco” y estimada en sui época como una de las mejores yeguas del país. En poder de don Ramón Cardemil Moraga, produjo un número importante de estupendos caballos corraleros. Algunos de ellos siguen sobresaliendo en la actualidad. Comodoro: “Quebrado” y “Ebonita”. Caballo de hermosa estampa. Bueno de riendas. Ganador de once Champion en corridas de vacas. Lo arregló Pepe Zavala. Poco fértil, en “Las Camelias”, sólo dejó cinco hijos, una de gran calidad, la yegua “Chamantina”, que destacó con Baltasar Puig. Empeñoso: “Quebrado” y “Monturera”. Gran Premio en la Exposición de 1954. Conducido por Manuel Bustamante, obtuvo once premios en rodeos oficiales. Su cabeza fue adoptada como símbolo en el escudo de la Asociación de Criadores de Caballares. Comodín: “Quebrado” y “Marraqueta”. Fue vendido de tres años a don Luis Martínez Saravia de Arauco. Padre de la sobresaliente yegua “Guindalera”, entre otros. Quillaycillo B: “Quebrado” y “Picada”. Criado por don Ernesto Rojas. Gran reproductor. Muchos hijos destacados en las medialunas. Adquirido por lo señores Hernán Cardemil y Pablo Quera, les dio muchas satisfacciones. Con “Chilca” dio un potrillo de baja alzada, pero excelente de vacas, “Chincal”. Pichanguero: Paréntesis; ingrato pero cierto. La nota sería falsa si le agregara o quitara hijos a “El Quebrado”. Los errores se pagan. Sin explicación razonable, el Coloso, o súper coloso de las quinchas, no aparece como hijo del gran Petizo. Pero lo era. Es tan grande el error, que ni siquiera se inscribió como criador y de propiedad de la Comunidad “Darío Pavéz G.” La obsesión de correrlo, hizo que prácticamente, no se reprodujera. “Fígaro” y “Arrullo”, un potrillo “nuevito”, a la liquidación del criadero se veía bien.
Traguito: “Quebrado” y “Pólvora”. Buen corralero. Ampliamente reproducido en otros criaderos. Antes de terminar, dos alcances importantes: 1° No disponemos de la totalidad de los “StudBook”, seguramente, por tanto, no recordaremos a todos los hijos del “Quebrado”. 2° Premeditadamente hemos dejado atrás a dos de sus hijos que por su calidad corralera y fabulosas condiciones de reproductores han enaltecido su corriente de sangre: “Guaraní” y “Comunista”
Pero don Raúl hace un segundo aire para abundar sobre este magnífico reproductor, a quien ahora pondera por sus hijos más importantes.
El Quebrado desde Comunista
La historia de los grandes padrillos, sea cual fuere la raza, obedece siempre a múltiples factores, sin embargo es fundamental que el individuo tenga condiciones excepcionales y que la conjunción de sangres sea acertada.
Comunista, fue hijo de El Quebrado y Tertulia, una bonita hija de Cosaco. Otro predestinado como su padre, en que la fantasía y la anécdota van de la mano. Este colorado oscuro, nació en 1931. Un muchacho mostraba aptitudes innatas de jinete corralero, pero carecía de caballos de fina sangre corralera: René Urzúa Urzúa , ¡el gran don René!. Don Darío Pavéz Gaete, era muy amigo de su padre y le obsequió dos yeguas corriendo y éste potrito. Cuando don René los fue a buscar, le dijo: "No es de exposición, pero tiene que ser un gran caballo de corrales. No lo apures, no lo exijas... llévalo con cuidado". René no lo llevó con cuidado. Le exigió lo indecible Lo corría todo el año. En una ocasión, el potrito, -siempre delgado-, no se vio bien, para componerlo corrió 21 novillos en un día. Desde entonces lo llamaron: "el potro de fierro". ¿Cuántos Champions ganó? ¡Cualquier cantidad! Inútil pretender contabilizarlos. Poquita alzada. Ningún atributo físico especial. Aparentemente frágil, pero con una fuerza descomunal. Dos fueron sus épocas. En el criadero "Santa Elsa", donde produjo caballos de gran nivel. Con Cebollita, dio a Tapaboca, con Armadora a Arrocito, propiedad de don Agenor González. Esos dos potros a su vez se reprodujeron bien. Huinca y Descariñado fueron hijos de Tapaboca. Comunista, jefe de corriente de sangre
Lo es. El caballito de "poca pinta" y mucha calidad lo consiguió. Su jerarquía corralera, su fortaleza moral, entusiasmó a don Estanislao Anguita para adquirirlo. El señor Anguita es una autoridad internacional en el mundo de la hípica y con ojo de radar para el Caballo Chileno. Recordemos que mucho ante adquirió a Alcatraz, otro "patito feo". ¿Cuál era su idea? Unir las sangres de El Quebrado y Alcatraz. El sorprendente resultado superó todo lo imaginable. Y llegamos a la cruza con Rigurosa. Esta yegua está ubicada entre las mejores de todos los tiempos. Engendraron tres hijos, tres ases: Ñipán, Champion de Chile; Rigor, de breve paso por las medialuna, pero crack. Lamentablemente se fracturó una mano prematuramente; y, finalmente, Recacha, muy buena de vacas. Algo más sobre Ñipán. Asombró en Palermo por su buena rienda. Lo condujo José Manuel Aguirre. Y deslumbró por su belleza. Para los técnicos argentinos representó la imagen exacta del caballo español de la época de oro. A juicio de los catedráticos mundiales, el resultado de una experiencia como la señalada, no es garantía de infalibilidad. Si lo fuera, la obtención de grandes caballos quedaría entregada al estudio de computadoras, y perderían vigencia las características de los individuos. Nos preguntamos, ¿No es posible que la sangre corralera tenga alguna particularidad hasta ahora no definida científicamente? ¿No juega un rol preponderante el instinto corralero? Un paréntesis para hablar de Rigor Nieto ilustre de El Quebrado. Liviano de físico, aunque muy superior al padre. También lo superó en alzada. Conformar la lista completa de sus hijos daría motivo a un trabajo especial. Optimo reproductor. Guardián I con Gloriada, una hija de Flotador, produjo a este potro alazán oscuro Poco físico. Liviano y un poco cilíndrico, pero formidable entre las quinchas. Una fallita orgánica, no detectada a tiempo limitó su campaña. En cuanto a su pelaje debe haberlo heredado de su abuela, Rigurosa. Siguió la tradición de los Guante y Quebrado, es un gran reproductor. Tal vez el más solicitado de este instante, ya que su hijo Rastrojo, obtuvo el último Champion de Chile. Padre, además, de Cacarita, Doña Juana, Guardián II y muchos otros destacados. Todos estos alazanes tostados. El criadero Santa Elba reproduce con gran éxito el gran padrillo: Taco, de notable parecido físico con El Quebrado, tiene 1,40 m. de alzada. En las medialunas fue un crack conducido por don Ramón Cardemil. Son varios los hijos que siguen su huella corralera. Entre tantos, cabe mención especial a Bellaco, un potro nuevo de enorme futuro. Bellaco es nada menos que hijo de la gran Percala, una de las mejores yeguas de todos los tiempos. El criadero Santa Elba, corre y reproduce a otro, Rigor de altísima, el lindo potro Rival. Distinguido, hermosa estampa, muchas veces “Premio Sello de Raza”. Crack actual. Deshaciendo mitos, no sólo dio a Rival como animal de estampa, sino a varios más, especialmente yeguas. Otro producto armonioso fue: Ensueño, criado por don Rodolfo Bustos. Un potro precioso, que habría dejado varios productos de calidad. Guaraní, el golpe al caballo moderno como antecesor del Estribo "Quebrado" y "Pereza". Su madre hija de" Cosaco" y "Corteza". Colorado, cariblanco y cuatro patas blancas. Diez años hizo collera con "Prestigio". Obtuvo veintisiete Champions. Adiestrado y conducido por Rodolfo Urbina. Manso como oveja y estupenda marcha. Símbolo de algunas diferencias entre exposiciones y sangre corralera, en "Las Camelias" se le estimaba un bonito caballo. En la Exposición de la Quinta Normal, no alcanzó a dar la primera vuelta de exhibición y fue eliminado. ¿Por qué?: Se le calificó de malos bajos. Verdad: corrió hasta los veintiún años y jamás acusó la más leve falla en sus extremidades; tampoco transmitió esa tara a sus hijos. Consideramos que Guaraní, Comunista y Refuerzo, son los más sobresalientes hijos de El Quebrado en la reproducción. Guaraní, tuvo una notable desventaja. En "Las Camelias" no dejó hijos reproductores. La razón fue que pertenecía a Raúl Pavéz Romero y este no disponía de yeguas de calidad. "Guaraní", pese a todo dejó un potro notable, "Estribo". Madre, la yegua " Fianza". Fue criado por Don Gustavo Donoso, vice campeón de Chile, crack de muchos rankings. Admirable de vacas. Exigido al máximo nunca decayó. Colorado oscuro. Padre del gran "Estribillo", Champion de Chile y vice campeón, años 1978 y 1979. Estribillo, el gran reproductor que desciende de El Quebrado "Guaraní" tuvo varios hijos. Al escribir recordamos a Roto Niño, Enojado, Orgullo, Gualicho, Tequila, etc. Todos buenos de corral. Hay ya varios nietos que inician sus campañas. Destaca con relieve propio "Curanto", un potrito de poca alzada pero que asoma como gran promesa, es un hijo de Tequila y de propiedad de Hugo Cardemil.
NOTA DEL DIRECTOR:
Después de más de 20 años éste gran artículo escrito por Don Raúl Pavéz Romero, hermano de Don Darío (propietarios de la Comunidad Darío Pavéz, lo más grande en el mundo corralero de la época), sigue manteniendo vigencia incluso podría uno equivocarse y sin saber de la data del escrito pensar que es contemporáneo de un experto en líneas de sangra antiguas.
Un pequeño aporte, Don Raúl escribe en esa época que el gran Potro Prestigio, habiendo sido por una década el mejor de Chile en los corrales, en reproducción, fue poco y mal reproducido. Lo poco tiene la explicación en que el Potro estaba destinado a las corridas por su gran calidad y lo mal, se debe referir a que le pusieron Yeguas de dudosa calidad. Sin embargo en los años setenta apareció corriendo en O´Higgins un Potro colorado de muy buen físico, hijo del Prestigio, llamado “ESTAMPIDO”(34403), que arrasó en los Rodeos de la zona , 3 o 4 Champions al hilo en su primera temporada y corriendo con un caballo que no cooperaba en nada, además conducido por un jinete amateur. El Potro fue formidable y no llegó a los Ranking por haberse enfermado severamente y dedicado posteriormente a la reproducción. Dejó 39 hijos, mucho de su descendencia han sido grandes caballos vaqueros.
Como hija del gran Prestigio aparece también la extraordinaria “PICHICUCHA” nominada como una de las tres yeguas más grandes del siglo pasado, muchas veces en el Ranking , conducida primero magistralmente por Don Nancho Cardemil Moraga(Q.E.P.D.) y posteriormente por Don Claudio Mallea. Siempre se dijo en el pasado que la Yegua era hija de PICHANGUERO, pero en los registros genealógicos aparece por PRESTIGIO y a su vez el Pichanguero no figura con ningún hijo de ese nombre.
Pese a todo, el Potro “PRESTIGIO”, figura en los registros con 101 hijos y sin duda parte de su progenie ha sido de gran calidad.
Muchas veces ha sucedido, que grandes Padrillos aparecen en la segunda o tercera generación, por ejemplo, Ñipán, Reparo, Coirón III, etc.
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